” La paloma protesta contra el aire sin darse cuenta de que es el aire lo que le permite volar “. Tagore.
Los entrenadores y los equipos nos marcamos objetivos, ya sean individuales o colectivos, cuando el resultado final del camino iniciado no es el que nosotros esperamos, a veces, viene la autodestrucción.Está bien y debemos crecer desde la autocrítica, entiendo que es la manera de mejorar en el día a día, pero no autodestruirse.
En el proceso para llegar a conseguir el objetivo marcado, algunos piensan que antes debemos ver dónde estamos, cuál es la realidad actual; otros que primero nos propongamos la meta y después analizar nuestra realidad, pero ¿ cómo queremos conseguir ese objetivo ? y ¿ qué haremos para conseguirlo ?.
Al final del camino, debemos valorar el trabajo que hemos realizado, independientemente si hemos conseguido el objetivo fijado.La autodestrucción viene cuando sólo nos basamos en el resultado final, por lo tanto, analizemos detenidamente el trayecto que hemos recorrido, porque seguro que habrán muchas más cosas positivas que negativas, y esto será nuestra gasolina para seguir creciendo.
Debemos enfocarnos más en el compromiso que tenemos con nosotros mismos y con las personas con las que estamos trabajando; mirar de afrontar las situaciones negativas con responsabilidad y valentía; ser íntegros en nuestros pensamientos y en las acciones; y lo que para mí es más importante: afrontar los problemas con una mentalidad positiva.
