” La meta no es aprender a tocar un instrumento, la meta es convertirse en músico “.
A veces, los entrenadores piensan en el resultado de marcador del equipo que están entrenando, y muy poco en la jugadora.
No nos engañemos, es la jugadora la que debe decidir qué tipo de jugadora quiere ser, solo ella tiene el poder de elegir su camino, ella es la que debe reforzarse en su día a día, y enfocarse no en lo que quiere lograr sino en la jugadora en quien se quiere convertir.
El entrenador puede ayudarla a que tenga claro: quién es, por qué quiere convertirse en músico, cómo lo hará, y qué quiere hacer.
Hay una frase que leí hará unos años, y quedó grabada en mi cabeza: ” pensar es fácil, hacer es difícil, pero hacer lo que se piensa es lo más complicado “.
Las conductas de una persona suelen ser reflejos de su identidad.Lo que hace es un indicador del tipo de persona que crees que eres.
Debemos observar más, para poder analizar el progreso que requiere la jugadora para ayudarla, no a que toque un instrumento, sino para que se convierta en músico.
La jugadora podrá llegar a convertirse en músico, a partir de buenos hábitos, y con la suma de los pequeños hábitos llegará a tocar un instrumento, y una evolución gradual la llevará a ser músico.
El entrenador debe ayudarla en el día a día, de manera continuada, y que la jugadora sea consciente y responsable, de que una acción aislada no la va a cambiar.
Deberá iniciar un proceso de formación de sus hábitos, desde una secuencia deensayo y error.
Será ella quien deberá experimentar, y el entrenador creará situaciones, en las que la jugadora tomará decisiones.Desde la experimentación con varias opciones, ella elegirá cual es la correcta.
En ocasiones, para cambiar quienes somos, debemos cambiar lo que hacemos.
