” La capacidad decisoria de los jugadores está directamente vinculada con la habilidad en escoger la mejor solución entre varias posibles “. Franco Pinotti
A partir del juego el jugador reconocerá que la utilización del dribling es una respuesta motriz a una situación problema, así pues, me parece evidente que no debe haber dribling más que cuando haya presencia de situaciones problemáticas.
Debemos crear consciencia y responsabilidad en el jugador en la forma de utilizarlo para resolver la situación.Las tareas que presentamos deben estar diseñadas para que los jugadores aprendan a estar preparados desde la variedad de movimientos para ser proactivos y reactivos.Que aprendan a entender el juego a partir de jugar desde los movimientos más básicos, sin tener prisa, paso a paso.
No debemos confundir el dominio del balón, el cual, es totalmente necesario trabajarlo desde estático, en movimiento, botar con un balón, con dos balones y progresar hacia botes con más dificultad.Esta capacidad de conseguir tener un buen dominio del balón tendrá su influencia en el desarrollo de otros gestos técnicos, como el tiro y el pase.Esto que parece una obviedad y tan simple, en muchas ocasiones lo damos por algo muy básico, y dejamos de trabajarlo, y lo que no se trabaja se olvida.
Jugando aprenderán que la ventaja desde el bote se consigue, descompensando los pies y el cuerpo del mismo, que sepan jugar con su peso corporal y con el impulso del mismo.A partir, de crear tareas donde prevalezca: la percepción del espacio, el tiempo y la velocidad,los jugadores aprenderán a entender la utilidad del dribling.
Es básico, que el jugador pueda desarrollar su instinto de buscar respuestas mediante unas pautas, en las que fundamentaremos el entendimiento de la utilización del dribling dentro de un contexto táctico y estratégico.
El dribling debe ser una amenaza constante, no solo un gesto accesorio para llegar a otro.
I’M AFRAID TO JUMP: JUMP !!!
