” La enseñanza no es la respuesta a la pregunta.La enseñanza es el medio que le permite encontrar respuesta a todas las preguntas “. Bill Allin
El otro día hablaba con el padre de un jugador, sobre el trabajo que había realizado su hijo durante la temporada, especialmente en el área técnica, táctica y psicológica.
En muchas ocasiones, los entrenadores para persuadir al jugador recurren a grandes tratados académicos complejos.
El tiempo me ha ido llevando, que para persuadir a un jugador, debemos llegar a él, a través de cosas más simples.
Desde la simplicidad se aclaran las situaciones más complejas, como escribe el filósofo José Antonio Marina, la evolución humana ha estado determinada por su capacidad de aprender.
Los jugadores quieren jugar a baloncesto, y los entrenadores debemos ayudarlos, creando una cultura de aprendizaje de diferentes herramientas técnicas, tácticas, físicas y psicológicas.Y después serán ellos quienes vayan encontrando las soluciones a los distintos problemas que plantea el juego.
Establecer contextos internos ( valores, conocimientos, recursos, comunicación y personas ), a partir de los cuales, el jugador adquiera confianza en sí mismo, y que tenga motivación continuada para mejorar.
El entrenador no ha enseñado nada hasta que el jugador aprende, y como le comentaba al padre, el aprendizaje es un proceso en el que se adquieren ideas de lo que enseña el entrenador, así como, que el jugador consiga exteriorizar sus virtudes.
Los entrenadores debemos involucrarnos plenamente con los jugadores como personas, manteniendo al tiempo la distancia y objetividad que exige el trabajo de entrenar.
Necesitamos entrenadores que aprendan a observar y analizar el trabajo que realizan los jugadores, tanto en los entrenamientos como en los partidos.
El jugador necesita no solo pensar con lo que le enseñamos, también actuar.Cuando el jugador aprende a pensar y actuar, inevitablemente comunica, ya sea de manera gestual como verbal.
I’m afraid to jump: jump !!!