Hace unos años entrenaba un equipo cadete masculino, disputamos la categoría preferente, empezamos jugando en lo que era el grupo A y terminamos jugando en el grupo B.
En toda la temporada ganamos 2 partidos y perdimos 28, a día de hoy ha sido una de las temporadas en las que he aprendido más baloncesto, tanto a nivel técnico y táctico como psicológico, fue una experiencia brutal.
Uno de esos días, caminando por la calle me encontré a un empresario/directivo, y me comentó: “¿cómo ha ido la temporada? (él ya lo sabía); pero mi respuesta fue: “estoy muy satisfecho con el trabajo que han realizado los jugadores y el cuerpo técnico, hemos aprendido muchas cosas que nos servirán para el futuro, tanto a nivel individual como colectivo, tanto en el baloncesto como en la vida diaria”; y su respuesta fue: “ya, ya, pero sólo ganar 2 partidos…”; para no entrar en ningún tipo de discusión que no llevaría a ningún lado, me despedí y seguí mi camino.
Al día siguiente le comentaba a un amigo mío, lo sucedido el día anterior, y me pregunta: ¿qué piensas?; mi respuesta: “nadie no gana siempre”.
Muchas veces las personas confundimos el ser feliz con el ganar, evidentemente que no me gusta perder y quiero ganar siempre, pero a mí me gusta disfrutar entrenando, trabajar para que los jugadores mejoren en el día a día, en fin, ser feliz haciendo lo que me gusta.
“La gloria es ser feliz. La gloria no es ganar aquí o allá. La gloria es disfrutar practicando, disfrutar cada día, disfrutar trabajando intensamente, mirando de ser mejor jugador que antes. ” Rafa Nadal
I’M AFRAID TO JUMP: JUMP!!!