Hará unos días, leía unas declaraciones de un neurocientífico, en las que comentaba que solo el 40% de lo que creemos “ver” proviene de la vista, el resto se compone de recuerdos o pautas que reconocemos de experiencias pasadas.
Se habla mucho de formar jugador@s inteligentes para poder jugar y pensar al mismo tiempo, es decir, elaborar un juego en el que de verdad decidan ell@s, porque los sistemas ofensivos, no son lo más importante (para mí), lo realmente significativo es qué hacen y cómo desarrollan a través de un estímulo, la correspondiente decisión y ejecución del gesto técnico.
Creo que para tener una buena toma de decisiones es importante lo QUÉ queremos hacer (táctica individual), pero sino sabemos el CÓMO hacerlo (técnica individual) tendremos un problema.
Una de las claves está en conocer la diferencia para proceder a la ejecución de un gesto técnico.
El trabajo detallado de los gestos técnicos es básico, elemental, tenemos de automatizar para desautomatizar. Automatizar gestos técnicos para desautomatizarlos y que tengan su aplicación en el QUÉ QUEREMOS HACER, y en base a marcar unas pautas y repetirlas sin oposición directa, con oposición directa, con comportamientos estáticos y dinámicos.
Podemos escoger la mejor solución, el gesto técnico adecuado que demanda la situación, pero si su ejecución es deficiente: no hay QUÉ sin el CÓMO.
Muchos 5c5 y pocos 1c1, 2c2, bote, pase, tiro, paradas, salidas. Las decisiones estratégicas influyen y modifican la toma de decisiones.
“Creo que el basket es un juego de equipo en el que gana el que tiene mejores iniciativas individuales”
Franco Pinotti, WINNERS Coach.