Saber y transmitir es una de mis obsesiones, con el paso de los años adquieres más conocimientos técnicos, tácticos, físicos y psicológicos sobre el entrenamiento, ya sea a través del estudio, asistencia a clínics, conversaciones con otros entrenadores (que no tienen porqué ser del mismo deporte, creo que es muy enriquecedor), asistencia a partidos, etc.
Hace un tiempo tuve una conversación con un entrenador de la máxima división de hockey sobre patines, hablamos mucho de metodología del entrenamiento y de la capacidad de transmitir que debíamos tener, para aplicarla para que los jugadores tuvieran el máximo progreso en el juego.
Yo veía jugar a su equipo haciendo todo lo que él proponía y tenía en su cabeza, conseguía transmitir sus conocimientos, para que fueran transformados por sus jugadores en su idea del juego. Personalmente, creo que era un fuera de serie a la hora de realizar que sus jugadores ejecutaran de una manera armoniosa lo que quería que hicieran en los entrenamientos y por lo tanto en los partidos.
Era un equipo que trabajaba muchísimas horas en todos los aspectos del juego, especialmente en la técnica, táctica y físico. En la faceta mental, pocas cosas pero de mucha calidad.
Él demostró como se transformaba el saber en el transmitir. Había otros entrenadores que tenían más conocimientos y mejores jugadores que él, pero muy pocos transmitían lo que sabían.
El resumen de aquella conversación:
– Debemos dominar exhaustivamente la metodología necesaria para la correspondiente enseñanza y como transmitirlo a los jugadores.
– El valor reside en la capacidad para construir el juego que queremos realizar y no tanto en el discurso de la palabra.
– Debemos transmitir de una manera didáctica.
“Una cosa es saber y otra sacar provecho de lo que sabemos.” Ricardo Olivós
I’M AFRAID TO JUMP: JUMP!!!